Últimamente tengo un horario muy arrítmico en el trabajo; a veces el escritorio está medio vacío... Pero también pasa, y cada vez con más frecuencia, que de repente me llega una avalancha de preguntas... Además de que ya no logro concentrarme muy bien por las tardes para leer por ejemplo, siento que a veces estoy fatigada para ver una película larga o poner atención en algo... Este mismo caos pasa con mi alimentación. Cuando tengo tiempo, sí, me aseguro de comer suficiente. Pero a veces me da un poco de pereza comer de una forma relativamente saludable... Y estoy picando dulces, galletitas navideñas...
Y ayer, justo cuando salgo a correr siento una fatiga impresionante, un poco de hambre, pero ni siquiera quiero volver a casa para comer; porque ya me vestí, ya me puse las zapatillas. El reloj gps después de 5 minutos consigue agarrar la señal. No puedo volver, no quiero... Mala decisión.
Por el minuto veinte siento un poco de escalofrío, pienso que es el clima. Pero no es así. Soy yo. Estoy fatigada... Tengo que aceptar que es un buen día y que debí haber puesto más atención a las señales de mi cuerpo. No, no alcancé mi meta, los 10 kilómetros.
Llegué a casa con una sensación terrible de cansancio, con dolores de cabeza y una sensación de mareo... Tomé cerca de tres litros de agua ayer por la noche, pues apenas ayer me doy cuenta que casi no tomo agua en el trabajo porque incluso para eso no tengo la cabeza ni los nervios. Y además estoy durmiendo fatal... Sí, no era el clima: soy yo.
Así que a cambiar un poquito. Porque si no me cuido yo, ¿quién lo hará? Pues sí, correr puedes hacerlo muchas veces, pero cada vez es la única. Y hay que escuchar cada vez las señales que manda el cuerpo... Porque además salí muy bien librada: no llevaba móvil, dinero, nada. En caso de que no hubiese podido regresar corriendo... hubiese tardado bastante en volver y además había aguanieve...
Que sea entonces esto un jalón de orejas...
Y sí, hoy tomé tanta agua como pude. Y he comido... como dios manda. :-)
Imprescindible beber mucho y comer bien y equilibrado pero también descansar.
ResponderEliminarHaces bien en escuchar al cuerpo y sus mensajes, ya verás como en un par de días tienes de nuevo las pilas cargadas.
Un beso.